La ciudad portuaria de Cádiz está considerada como la población más antigua de occidente. La ciudad conserva un impresionante casco histórico, pequeño, recogido y muy agradable de pasear. Lleno de monumentos y hermosas playas, encontrarás muchas cosas que hacer en Cádiz.
La fundación de la remota Gadir por los fenicios se remonta al año 1100 a.C. Luego, pasaron por ella cartagineses, romanos, visigodos, musulmanes y cristianos, que han dejado una huella histórica notable.
Qué ver y qué hacer en Cádiz
Coloquialmente conocida como la “tacita de plata”, Cádiz está cimentada en una franja de tierra rodeada de mar, una antigua isla que con el paso del tiempo se acabó uniendo a la península ibérica por un estrecho istmo.
En este articulo te presentamos algunos de los atractivos para ver y hacer en la ciudad de Cádiz.
1. Hacer un free tour para conocer y recorrer Cádiz
Cádiz es una ciudad excelente para ver y vivir. Por eso, puede resultarte interesante conocer Cádiz haciendo una visita guiada gratuita con un guía local. Con este free tour descubrirás los principales puntos de interés turísticos de una de las ciudades más antiguas del mundo.
Este interesante tour de 2 horas de duración, comienza en la céntrica plaza de San Juan de Dios para comenzar un recorrido a pie por Cádiz. La visita guiada te permitirá conocer la historia de una de las ciudades más antiguas de España.
Desde el Ayuntamiento y de camino al Barrio del Pópulo descubriremos algunas curiosidades sobre el origen de Cádiz. Recorriendo la parte más antigua de la ciudad también conoceremos algunos de los monumentos más importantes de Cádiz, como la catedral de la Santa Cruz o la plaza de las Flores.
Durante el free tour también se visitará el Mercado Central de Abastos donde encontraremos el famoso atún de la bahía, un producto delicioso.
Seguiremos explorando las tradiciones y conociendo la cultura local de la ciudad de Cádiz
El recorrido continuará por el barrio de la Viña donde se encuentra el famoso teatro de Falla, uno de los edificios más relevantes del Carnaval de la ciudad gaditana. Este es un momento ideal para hacerse fotos.
La ruta guiada continuará hasta la playa de La Caleta, puerto natural donde fenicios, romanos y cartagineses llegaron con sus embarcaciones. En esta coqueta bahía podremos contemplar sus bonitas vistas y conocer los castillos de San Sebastián y Santa Catalina.
2. Visitar la imponente Catedral
Entre las diferentes visitas que hay que hacer en Cádiz, destaca una visita a su Catedral. Conocida como Santa Cruz sobre el Mar o Santa Cruz sobre las Aguas, es una gran obra arquitectónica. Destaca por sus grandes dimensiones y presenta una curiosa mezcla de estilos.
El templo nació con el objetivo de superar la altura de la Giralda de Sevilla. De predominante gusto neoclásico con toques barrocos y hasta rococó, la Catedral tardó casi un siglo en ser terminada y fue consagrada en 1838.
Problemas económicos, como la pérdida de las riquezas que habían llegado permanentemente de las Américas o guerras como la de Independencia retrasaron la construcción del templo.
Una de sus peculiaridades es su cúpula forrada con azulejos vidriados dorados, que resplandecen con el sol.
La fachada principal está enmarcada por dos torres octogonales, de las que la denominada Poniente o del Reloj, con sus 74 metros, es el punto más alto de la ciudad y permite contemplar unas impresionantes panorámicas.
En su interior alberga algunas reliquias valiosas, como una de las espinas de la corona de Cristo o uno de los pedazos de la cruz de madera en la que fue crucificado y un objeto tan histórico como la mesa en la que Fernando VII firmó la Constitución de 1812.
3. Qué ver y qué hacer en Cádiz: Pasear por un fascinante centro histórico
El casco antiguo de Cádiz está inmerso en un trazado de callejuelas largas y estrechas, repleto de iglesias y capillas, casas palacio y altas torres, museos y muchos otros puntos de interés.
Para realizar este recorrido lleno de historia es interesante conocer a través de este tour guiado parte de la Cádiz medieval y sus barrios más tradicionales.
Es un imprescindible para cualquier visitante de la capital gaditana perderse por esas calles sin prisa, disfrutando del paseo.
Dentro del centro histórico, el barrio del Pópulo es el más antiguo, un conglomerado intrincado de callejuelas estrechas y angostas, flanqueado por arcos y murallas.
Es el verdadero núcleo medieval, cuyo origen se remonta al siglo XIII y uno de los más antiguos de Europa.
El barrio posee tres arcos de entrada: el de la Rosa, con sus matacanes, el del Pópulo y el Arco de los Blancos. En su interior se ubican joyas como la iglesia de la Santa Cruz, la Catedral, palacios barrocos como la Casa del Almirante y restos arqueológicos del Teatro Romano.
El barrio de la Viña es el verdadero corazón de la capital y de su fiesta más emblemática, los Carnavales.
Antiguo barrio de pescadores, con una fisonomía de calles estrechas y empedradas repletas de bares y con gran oferta gastronómica donde predominan pescados y carnes.
Aquí se encuentran los atractivos turísticos de los castillos de la playa de la Caleta y el Teatro Falla. Por su parte, el tradicional barrio de Santa María es la cuna del flamenco en Cádiz.
4. Degustar la deliciosa gastronomía gaditana
Algo que hacer en Cádiz, disfrutando de forma especial, es degustar su espectacular gastronomía, una de las más variadas de Andalucía, con multitud de recetas e ingredientes.
Comer bien en Cádiz es fácil y toda una tentación, porque dentro de la zona amurallada se dispone de un montón de bares y restaurantes.
Además con zonas tan emblemáticas como la calle Virgen de la Palma, la plaza de las Flores, la plaza de San Martín o los alrededores de la Catedral. Dentro de la variedad, el pescadito frito es uno de los símbolos de Cádiz que incluso se ofrece en cartuchos en puestos callejeros.
Los pescados más comunes son pequeños y con pocas espinas, como chanquetes, salmonetes, boquerones o sardinas. Otros platos gaditanos icónicos son la tortillita de camarones, que se sirve recién hecha y crujiente.
Como especialidad gastronómica también está el cazón en adobo, cocinado a base de la carne de esta especie de gran tiburón. Se sirve rebozado y frito en aceite de oliva y con un adobo hecho con vinagre blanco, pimentón, comino, ajo y orégano.
Y, por supuesto, el atún rojo de almadraba, que tanta riqueza ha traído a Cádiz desde hace siglos. El atún rojo es uno de los manjares más apreciados y un plato indispensable en la ciudad, preparado de múltiples formas.
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5. Paseo en barco por la Bahía de Cádiz
Entre algunas de las actividades para hacer en Cadiz te proponemos una excursión por la bahía de Cádiz en barco con patrón certificado. La travesía puede ser una travesía única por el Atlántico y tiene una duración de 3 horas.
Comienza y finaliza en el Real Club Náutico de Cádiz. El barco pasa bajo los arcos del Puente de la Constitución de 1812, pasa por el Puente José León de Carranza y cruza el istmo que une la ciudad de Cádiz con San Fernando.
El paseo continuará hacia las costas de la playa de Valdelagrana donde se realiza una parada de una hora para disfrutar de los hinchables, del paddle surf y del resto del material que propociorna la excursión, además de un aperitivo a bordo.
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6. Disfrutar de las playas de Cádiz
Otro de los grandes atractivos de Cádiz, ciudad situada en la denominada Costa de la Luz, son sus playas. Más de siete kilómetros ininterrumpidos de arena dorada que conforman cuatro playas diferenciadas.
La más conocida y emblemática es la playa de la Caleta, una extensión de unos 450 metros, ubicada en pleno casco antiguo. Su imagen es una de las más conocidas de la capital gaditana, rodeada por los castillos de San Sebastián y Santa Catalina y presidida por el antiguo balneario de La Palma.
En la antigüedad, era el puerto en el que atracaban las embarcaciones fenicias, cartaginesas y romanas. Ahora, es una playa tranquila, perfecta para tomar el sol o nadar en sus aguas tranquilas y azules y contemplar unas puestas de sol espectaculares.
La Playa de la Victoria, considerada como una de las mejores playas urbanas de Europa, es la más concurrida, con una longitud de más de dos kilómetros y medio y una anchura media de 185 metros.
De arena fina y dorada y con cierto oleaje, permite realizar muchas actividades deportivas y cuenta con un enorme paseo marítimo con amplia oferta de bares y restaurantes.
La más pequeña es la playa de Santa María del Mar, de tan solo 370 metros, muy usada por los surfistas, mientras que la playa de Cortadura es la más tranquila y salvaje, en una zona deshabitada.
7. Aprender de la dilatada historia de la ciudad en el Museo de Cádiz
Uno de los lugares imprescindibles a visitar en Cádiz, ubicado en la animada plaza de la Mina. Su origen se encuentra en la Desamortización de Mendizábal de 1835 y la secularización de obras procedentes de conventos.
Anteriormente, este edificio de típico estilo neoclásico, había sido el convento de San Francisco. El museo consta de tres plantas con una importante selección de objetos artísticos y hallazgos arqueológicos.
La sección arqueológica cuenta con un total de ocho salas que discurren desde la Prehistoria, la Antigüedad clásica, con objetos de las ruinas de Gades y Baelo Claudia, hasta la Edad Media.
La sección de Bellas Artes se divide también en ocho salas, haciendo un recorrido por la pintura desde el siglo XVI hasta la actualidad. Destacan obras flamencas del XVI como las de Rubens, obras de Zurbarán para la cartuja de Jerez entre 1637 y 1639.
Destacan cuadros de Murillo y sus discípulos de la tradición barroca. También, cuenta con una interesante muestra del Siglo de Oro español, con autores como Alonso Cano o José de Ribera y en la sección de Arte Contemporáneo expone obras de Miró.
La segunda planta se reserva para una exposición de las impresionantes marionetas de la Tía Norica, tradición gaditana con más de dos siglos de historia. Sin duda, las piezas más importantes del museo, con valor histórico incalculable, son los dos famosos sarcófagos antropoides. De origen fenicio, del siglo V a.C, estos se encontraron accidentalmente en 1887 en los terrenos del actual astillero.
8. Aprovechar un free tour para conocer Cádiz de noche
Sin duda, Cádiz es una ciudad fascinante de ver y vivir tanto de día como de noche. Por eso, resulta tan interesante este free tour gratuito de hora y media de duración, gratuito y guiado, por el centro histórico.
La visita está diseñada para disfrutar de la cara mágica de la “tacita de plata” cuando se esconde el sol y las calles y monumentos se iluminan mostrando nuevos detalles que se escapan de día.
Al caer la tarde comienza este recorrido a pie junto al edificio del Ayuntamiento, para descubrir el lado nocturno del antiguo barrio del Pópulo.
Contemplaremos la mole de la Catedral, una construcción en la que se aprecian distintos estilos, porque tardó más de 100 años en ser terminada.
También nos detendremos en los exteriores de la iglesia de la Santa Cruz, un templo que se dice fue erigido sobre los restos de una mezquita en el siglo XIII, por orden del rey Alfonso X el Sabio.
Continuando el paseo a orillas del mar veremos el incomparable perfil nocturno de las casas típicas gaditanas y llegaremos hasta el Gran Teatro Falla, edificio clave en la celebración de los Carnavales.
El Gran Teatro Falla con su hermosa iluminación, permite contemplar los peculiares detalles neomudéjares de su fachada. Finalizaremos cerca de la emblemática playa de la Caleta, donde podemos disfrutar de las espléndidas vistas al mar.
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9. Descubrir los icónicos castillos de San Sebastián y Santa Catalina
Estas dos emblemáticas fortalezas gaditanas custodian la costa desde dos extremos opuestos de la playa de la Caleta. Tras varios siglos de uso militar, ambas acogen en la actualidad exposiciones, conciertos y otras actividades culturales.
El castillo de San Sebastián se ubica en la cima de un pequeño islote rocoso del extremo más occidental, que se conecta con la ciudad a través de un malecón, un pasaje de piedra y hormigón conocido como Paseo de Quiñones.
Según la tradición, este islote albergó el templo fenicio de Moloch/Kronos. El nombre actual proviene de una capilla construida en 1457.
La Capilla fue construida con los restos de un antiguo faro, por los tripulantes de un navío veneciano al que se permitió atracar para curarse de la peste. La estructura que conocemos hoy se origina a principios del siglo XVIII.
En el otro extremo de la playa, se alza el castillo de Santa Catalina, con su característica planta en forma de estrella de cinco puntas.
De ellas, tres miran al océano, mientras que las otras dos permiten el acceso desde tierra firme, protegido por baluartes. Fue construido por orden de Felipe II, tras el saqueo angloholandés de 1596, en lo que se consideraba uno de los frentes más vulnerables por mar.
10. Contemplar Cádiz a vista de pájaro desde sus miradores
Uno de los planes más interesantes en todas las ciudades es la oportunidad de contemplar sus calles y edificios desde las alturas. Sabemos que en Cádiz llegaron a existir hasta 160 torres miradores, de las que quedan en la actualidad 126, casi todas ellas de propiedad privada.
Con las torres miradores que se construían en las azoteas de sus casas particulares, los ricos comerciantes ganaban altura para observar la llegada de los barcos que venían de las Américas cargados de mercancías.
Eso nos ha dejado miradores como la Torre Tavira, única visitable hoy en día, que constituye la cota más alta de la ciudad, a unos 45,35 metros de altura sobre el nivel del mar. Por esto, fue designada torre vigía oficial del puerto en el año 1778.
Actualmente, tanto por su altura, como por su ubicación, que permite vistas de 360º, es el mejor mirador de Cádiz.
El otro gran mirador gaditano es la Torre de Levante o Torre del Reloj, la más famosa de las dos de la Catedral. Su zona de observación está en el campanario, a unos 40 metros de altura.
Su altura permite observar todo el paseo marítimo de la parte externa al casco histórico. Se conoce como “Puerta de tierra”. Además de conseguir una panorámica muy completa de la ciudad, desde aquí, las vistas al Atlántico son espectaculares.
11. Descansar en el bucólico Parque Genovés
Es el corazón verde de la ciudad, un delicioso rincón escondido entre las murallas de la ciudad antigua y el casco histórico. Un inmenso parque con cerca de 30.000 metros cuadrados, ideal para disfrutar de un agradable paseo en un ambiente romántico.
El parque alberga hileras de árboles recortados, algunos muy antiguos y gigantes, farolas y verjas exteriores que transportan a tiempos pasados. Este frondoso espacio verde, un auténtico vergel tropical, tiene sus orígenes en el siglo XVIII.
Se encargó de su diseño el jardinero valenciano Eduardo Genovés y Puig, que lo convierte en todo un muestrario botánico, con más de 150 especies distintas de árboles arbustos y palmeras, con carteles informativos que nos cuentan sus características.
El parque tiene forma trapezoidal y desde su entrada principal se accede a una avenida central dividida en tres calles por una doble hilera de parterres. Está dotado con un estanque con cascada.
En el parque conviven decenas de aves, esculturas de piedra, una gruta visitable, fuentes como la famosa de los niños del paraguas y hasta un templete donde se celebran conciertos en ocasiones.
12. Asombrarse de la grandeza del Monumento a la Constitución en la Plaza de España
La plaza de España, cerca del puerto, es una de las más emblemáticas de la ciudad. Un gran espacio ajardinado de planta rectangular rodeado de edificios singulares, como la Casa de las Cuatro Torres o el edificio de la Aduana.
El lugar cuenta con varias especies arbóreas singulares y monumentales, de una edad de entre 80 y 90 años.
Esta plaza nació como una ampliación de la antigua plaza del Carbón, ganando terreno al mar, cuando se derribaron las murallas de la zona del puerto a principios del siglo XX.
La principal atracción de la plaza es el imponente Monumento a las Cortes y la Constitución de Cádiz de 1812 y al Sitio de Cádiz por las tropas francesas durante la Guerra de Independencia, situado en el mismo centro.
Indudablemente, la promulgación de la Constitución de 1812 es uno de los hitos más importantes de la historia de Cádiz y merecía un homenaje, que se construyó un siglo después, en una obra que se inauguró en 1929.
Es un monumento enorme, con multitud de detalles, concebido como un gran hemiciclo donde se levanta un alto pilar en forma de obelisco y una gran escultura de mármol que preside el monumento vestido con larga túnica.
Lleva la ley escrita de la Constitución en la mano derecha y una espada en la mano izquierda. El conjunto incluye estatuas ecuestres de la paz y la guerra, la representación de Hércules y grupos escultóricos dedicados a los ciudadanos e inscripciones que recuerdan a los diputados.
13. Conocer la famosa Torre Tavira y la curiosa cámara oscura
Es una interesante actividad para hacer en Cádiz con esta visita guiada, podrás visitar la Torre Tavira y la cámara oscura. Además conocerás los más emblemáticos edificios de la ciudad.
La Torre Tavira es la más conocida y alta de las 126 torres miradores que salpican el centro de Cádiz. Hay que tener en cuenta que, durante el siglo XVIII, Cádiz fue uno de los puertos más importantes de Europa para las mercancías procedentes de las Américas.
Para vigilar sus embarcaciones los comerciantes hacían construir torres miradores en sus casas, que acabaron conformando una estampa urbana típica. Esta torre fue construida en el siglo XVIII en estilo barroco, en la Casa palacio de los Marqueses de Recaño. Y actualmente aloja el Conservatorio de Música.
Al ser el edificio más alto del casco histórico, a 45 metros de altura sobre el nivel del mar, se convirtió en 1778 en la torre de vigilancia oficial del puerto, derivando su nombre del primer vigía, Antonio Tavira.
Además de su valor monumental, la torre alberga una de las principales atracciones turísticas de la ciudad, la cámara oscura.
La cámara oscura proyecta imágenes en movimiento de lo que sucede en el exterior. Se trata de un sistema óptico que refleja en una pantalla blanca circular cóncava, en tiempo real, imágenes de Cádiz.
Estas imágenes entran a través de un espejo y lentes situadas en la azotea. La torre aloja, también, un par de salas de exposiciones y un mirador desde donde se observa una de las mejores panorámicas de la ciudad.
>>> Visita guiada la Catedral y la Torre Tavira <<<
14. Tapear mientras se visita el Mercado Central
Tapear es toda una tradición en Cádiz, una costumbre arraigada que permite probar la mayor cantidad de platos a base de tapas, raciones y medias raciones.
Dentro de esta costumbre, la zona del Mercado Central ha sabido ganarse la confianza de grandes cantidades de personas, locales y forasteros, como un amplio lugar de encuentro y reunión.
Lugar en el que los gaditanos se juntan todos los días para tomar cerveza y tapas por los múltiples bares instalados en los alrededores.
El Mercado Central de Abastos constituye un atractivo interesante para visitar en Cadiz. Inaugurado en 1838 e instalado en un edificio con forma de cuadrilátero neoclásico a modo de plaza porticada.
En su interior, este enorme recinto acoge multitud de puestos que venden un amplio abanico de productos frescos locales, como pescado, embutidos, fruta, verdura y especias.
Además, está junto a la típica Plaza de Topete, más conocida como Plaza de Flores, por acoger en su pequeño espacio triangular multitud de coloridos puestos.
Merece mucho la pena una visita, porque es uno de los rincones con más encanto de la ciudad. En el centro de esta plaza reposa el monumento al ilustre Columela, autor de la primera obra escrita sobre agricultura que se conoce.
15. Explorar el importante yacimiento fenicio de Gadir
Una visita imprescindible para conocer la historia gaditana, ya que este yacimiento recoge los restos más importantes de la presencia fenicia, haciendo un viaje hacia épocas muy remotas.
Este asentamiento fue uno de los más antiguos de Occidente, pues ya en el primer cuarto del primer milenio a.C. se produjeron las primeras llegadas de fenicios de Tiro y fundaron una colonia estable a la que hoy denominamos Gadir.
El yacimiento, situado bajo los cimientos del Teatro del Títere, es de un valor histórico imprescindible por la escasez de restos arquitectónicos que se conservan en el Mediterráneo de la cultura fenicia.
La visita se organiza en torno a la historia de un hipotético fenicio, al que se ha bautizado como Mattan, que murió durante un gran incendio que ocurrió en la ciudad en el siglo VI a.C.
El yacimiento se divide en diferentes niveles según los periodos de ocupación del asentamiento. Se puede distinguir el trazado de las calles, con las casas y herramientas propias del siglo IX a. C.
En el yacimiento se conservan ocho viviendas que se distribuyen en dos terrazas y se organizan alrededor de dos calles adoquinadas.
Todas las construcciones están realizadas, básicamente, con barro y arcilla. Gracias a eso, se puede incluso visualizar huellas fosilizadas de bovinos que habrían pasado por las calles pavimentadas con arcilla.
Además de los vestigios fenicios se han conservado en la zona los restos de una fábrica romana de procesamiento de pescado, donde se pueden observar las piscinas utilizadas para la conservación del pescado en salmuera.
16. Escuchar flamenco en el Centro Municipal de Arte Flamenco la Merced
El flamenco es parte de la esencia gaditana más pura, un arte tan fundamental que merece que una de las cosas que hacer en Cádiz sea profundizar en sus raíces y su presente.
Una buena forma es visitar este centro, que se ha ido consolidando como un referente en la disciplina, manteniendo también cursos de verano y clases magistrales.
El centro se creó con el objetivo específico de fomentar el arte flamenco entre toda la población. Además, da visibilidad a las jóvenes promesas del flamenco, algunos de los cuales ya han alcanzado proyección internacional.
Está ubicado en el corazón del barrio de Santa María, uno de los más tradicionales, al que se identifica como cuna y centro neurálgico del flamenco gaditano. Las instalaciones ocupan el espacio de un antiguo mercado de abastos, que fue reconvertido en espacio cultural.
Constituye una superficie global de 740 metros cuadrados, con seis salas de pruebas insonorizadas para la enseñanza y un gran escenario principal para los espectáculos, con más de 200 asientos.
Además de las actuaciones, ofrece talleres y otros tipos de actividades y eventos relacionados con el tema, contando con una programación muy variada.
17. Admirar la Iglesia de Santa Cruz, el templo más histórico de Cádiz
La que fue la Catedral Vieja de Cádiz hasta 1838, es el templo con más historia de la ciudad y merece una visita. La tradición dice que fue construida sobre los cimientos de una antigua mezquita musulmana, a instancias de Alfonso X el Sabio.
El rey quería ser enterrado allí, un deseo que al final no pudo hacerse realidad. Erigida como catedral en 1263, desde sus orígenes.
Por su excesiva proximidad al mar, fue continuamente amenazada por piratas, asaltada e incendiada, y también sufrió por los vendavales. Todo esto hacía muy difícil su pervivencia hasta nuestros días.
El edificio original era gótico-mudéjar, con tres naves. El ataque angloholandés de 1596 causó graves daños y su reconstrucción en 1606 se afrontó en estilo manierista y barroco.
El aspecto exterior es muy sencillo, contando como únicos elementos decorativos con tres escudos con los emblemas de los Reyes Católicos, la Catedral y el obispo García de Haro.
Cuenta con una torre de planta rectangular, separada del edificio y rematada por una aguja poligonal cubierta por cerámica vidriada.
En el interior del templo, destaca su retablo mayor, una joya fundamental de la escultura barroca, en madera dorada.
18. Recorrer la plaza del Ayuntamiento y su casa consistorial
Oficialmente conocida como plaza de San Juan de Dios, es un espacio monumental que constituye uno de los núcleos centrales de la ciudad.
En el siglo XVI, ya presidida por el Ayuntamiento, se usaba como centro de actividad urbana, estratégicamente abierta al mar y ligada al comercio de los productos que llegaban de las Indias. Incluso, cumplió la función de mercado de abastos hasta bien entrado el siglo XIX.
La plaza está repleta de palmeras, con fuentes, estatuas monumentales, como la de Moret, importante político gaditano decimonónico, y la espectacular torre del reloj de la casa consistorial.
Allí se ubican interesantes edificios como la iglesia de San Juan de Dios, la Casa de los Pazos Miranda y el propio Ayuntamiento, que se encuentra allí desde el siglo XVI. El edificio está remodelado en dos etapas diferentes, la neoclásica y la isabelina.
Su fachada, con pórtico liso sostenido por arcos de medio punto y un frontón triangular donde destaca el relieve de Hércules, mítico fundador de la ciudad, es digna de ser admirada.
En su interior, también tiene estancias de gran interés, como la Sala del Consejo, ricamente decorada con mármol, estuco y frescos de estilo isabelino de 1870.
19. Rendir homenaje a la Constitución de 1812, visitando el Museo de las Cortes de Cádiz
La promulgación de la Constitución de 1812, la primera de toda la historia de España, es un acontecimiento trascendental en la historia gaditana.
Por eso, otra de las cosas que hay que hacer en Cádiz es visitar este museo, que se creó como un referente de las iniciativas llevadas a cabo en la ciudad andaluza para celebrar su primer centenario.
El museo fue inaugurado el 5 de octubre de 1912, en un edificio proyectado con una fachada de inspiración neoclásica, balconada central y flanqueado por gigantescas columnas jónicas.
En el interior, se utilizan elementos de la arquitectura del hierro y se distingue la escalera de orden imperial que une las dos salas principales.
El museo en sí alberga objetos de los siglos XVIII y XIX, la mayoría vinculados al asedio de las tropas napoleónicas, entre 1810 y 1812 y la promulgación de la Constitución de 1812, como armas, copias de textos legales o banderas.
En la primera planta destaca especialmente la imponente maqueta en relieve de Cádiz, confeccionada en 1777 en caoba y marfil por un amplio equipo de artesanos, por encargo del rey Carlos III.
Es un modelo tridimensional a escala 1/250 que refleja cómo era la ciudad dentro de la muralla durante el último cuarto del siglo XVIII.
También destaca el gran lienzo monumental del pintor Salvador Viniegra, que representa la promulgación de la Constitución de 1812.
20. Ver el teatro romano más antiguo de la península
Ciudad de múltiples culturas, en Cádiz también podemos distinguir la huella de los romanos. Sin duda, la muestra de mayor interés es su gran teatro construido hacia el año 70 a. C. por familiares y amigos de Julio César.
Fue descubierto en 1980, cuando se buscaba lo que se creía que debía ser un supuesto castillo de la zona.
Su origen se identifica en el periodo en que el florecimiento de la ciudad de Gades aconsejó la ampliación de la ciudad, construyendo un nuevo barrio, que conocemos como Neápolis. Entonces se edificó un anfiteatro y un teatro, cuyos restos descansan bajo el actual barrio del Pópulo.
Sin duda, debió tener bastante relevancia, ya que es mencionado en las obras de autores como Cicerón o Estrabón y se le estima una capacidad de más de 10.000 personas.
Este teatro romano, el segundo más grande de España, solo superado por el de Córdoba, es el más antiguo de la península ibérica y por eso tiene características arquitectónicas con rasgos arcaicos de la arquitectura griega.
La cavea, con forma de herradura, se construyó aprovechando un talud del terreno y para construir la galería fue preciso cortar la roca natural. También debió de ostentar una notable decoración, acorde a la grandeza del edificio.
En el Museo de Cádiz se conservan algunas piezas de la cornisa de mármol, frisos y columnas de alabastro. Los restos de las zonas excavadas se pueden observar a través de pozos de cristal, pero todavía quedan sepultadas importantes zonas de su estructura, como la escena y el pórtico.
21. Asistir a una representación en el Gran Teatro Falla
En la plaza Fragela, junto a la Facultad de Medicina, se encuentra el Gran Teatro Falla, el más importante de la ciudad. Desde principios del siglo XVIII hay vestigios de teatros permanentes y a principios del XIX ocupó el espacio el Teatro San Fernando, destruido por un incendio.
En 1885 se iniciaron las obras del Gran Teatro de Cádiz, que finalizó en 1910. En 1926, toma el nombre del famoso músico Manuel de Falla, hijo predilecto de Cádiz. El edificio está construido en estilo neomudéjar.
Destaca su fachada en ladrillo rojo y tres grandes puertas de arco de herradura en la fachada principal, con dovelas que alternan los colores rojo y blanco. El gran salón interior tiene estructuras de hierro que utilizan decoraciones de inspiración nazarí y la cubierta está formada por una bóveda de tipo califal con escenas alegóricas.
A lo largo del año, el teatro tiene su temporada fija de espectáculos con conciertos, obras de teatro y actividades relacionadas con las artes escénicas. Aunque, su momento cumbre se produce durante los Carnavales.
Carnaval es la fiesta más grande y emblemática de Cádiz. Durante el mes anterior, se celebra aquí el Concurso de Agrupaciones Carnavalescas. Este certamen se celebra íntegramente en el Gran Teatro Falla, con sus chirigotas, coros, cuartetos y comparsas.
22. Conocer los misterios y leyendas de Cádiz
Cádiz alberga relatos fascinantes de su pasado que no te dejaran indiferente. Entre algunas de las actividades por hacer en Cádiz te recomendamos conocer parte de su historia, leyendas, mitos y misterios de su pasado.
Para descubrir parte de toda esta historia te proponemos este free tour totalmente gratuito. Con una duración de 2h, este tour viene acompañado de historias que han ido pasando de generación en generación.
A parte de recorrer algunas de las calles y monumentos más conocidos de la ciudad, te permitirá descubrir algunos de los fenómenos que se han dado en la ciudad gaditana y que han suscitado diferentes teorías.
El tour comienza al atardecer en el Ficus del Mora dirigiéndose al ayuntamiento de Cádiz. Tras conocer sus historias más conocidas se acercará al Callejón del Duende, la calle más estrecha de la ciudad, y desde ahí recorrerá la Catedral de Cádiz, la Plaza Mentidero y la Parroquia de San Antonio. El recorrido finaliza en la Plaza de San Antonio.
Si prefieres ir un poco más por libre también te recomendamos este otro tour privado de mínimo 2 personas para conocer las leyendas y misterios de Cádiz: Tour de los misterios y leyendas de Cádiz.
23. Acercarse hasta la monumental Puerta de Tierra
Esta es otra de las visitas culturales e históricas que hacer en Cádiz, ya que es un monumento muy significativo que marca el límite entre el casco antiguo y la zona más moderna.
Su historia tiene mucho que ver con el asalto de las tropas angloholandesas en 1596, que conllevó el saqueo y la destrucción de lugares históricos. Se consideró imprescindible emprender una tarea de fortificación más adecuada, que iría evolucionando a lo largo del tiempo.
Uno de los lugares elegidos para este objetivo fue este reducto de la Puerta de Tierra, la que antiguamente era la única entrada terrestre en la ciudad.
Este conjunto defensivo alcanzó el aspecto que hoy conocemos en el siglo XVIII. La portada está labrada en mármol, dando más apariencia de retablo religioso que de fortificación militar.
En el centro del vestíbulo de entrada se destaca una torre baja, en la que se ha establecido una exposición llamada “Cádiz virtual”.
Esta exposición hace un recorrido temático por el siglo XVIII y la zona superior del conjunto amurallado se puede visitar.
24. Descubrir los Pueblos Blancos de Cádiz
Realizar como excursión los pueblos blancos de Cádiz es sinónimo de conocer los pueblos más hermosos de Andalucía. Este recorrido de gran atractivo y encanto engloba 19 pueblos que no te dejarán indiferente.
Muchos de estos pueblos destacan por sus fachadas de cal y sus adornos de flores con vivos colores.
Una vez empieces tu ruta por los pueblos blancos de Cádiz no dejes de recorrer sus habituales cascos antiguos de trazados medievales y calles estrechas.
Además para los amantes del senderismo, aventurarse a descubrir esta bonita ruta significa descubrir y enamorarse de todo el entorno y naturaleza que la rodea.
25. Vejer de la Frontera y Media Sidonia
Entre los pueblos blancos a destacar se encuentran Vejer de la Frontera y Media Sidonia. Su visita es un imprescindible entre las cosas qué hacer en Cádiz.
Te animamos a continuar leyendo sobre estos dos pueblos en particular y a dejarte seducir tanto por el encanto de las calles encaladas de Vejer de la Frontera como por la magnífica historia de la Medina Sidonia. Te recomendamos esta excursión a Vejer y Medina Sidonia.
Forma parte de la Red de los Pueblos considerados más bonitos de España. Ha sido declarada Conjunto Histórico y galardonada con el Premio Nacional de Embellecimiento de los Pueblos andaluces.
Pueblo costero, con una bonita muralla, cuenta con tan sólo nueve kilómetros de su núcleo urbano y se ubica en una colina cercana al río Barbate. En su historia destaca el paso de diferentes culturas como: fenicios, cartagineses, romanos, visigodos y árabes.
Al pasear por sus laberínticas calles de barrios como el de la Judería y observar su arquitectura popular, se puede apreciar el legado árabe sustentado en el tiempo.
Cuenta con una de las playas más famosas del litoral gaditano, la playa del Palmar. Destaca su fina arena dorada y la claridad de sus aguas.
El viento de la zona y su bonito entorno natural es un aliado perfecto para los aficionados a deportes como el surf.
Por su parte Medina Sidonia también ha sido galardonada con el Premio Nacional al embellecimiento y declarada como Bien de interés Cultural y Conjunto Histórico Artístico.
Media Sidonia es conocida por la belleza de sus casas blancas y encaladas, y sus floridos balcones. Es una de las poblaciones más antiguas de España reconocida por su destacado patrimonio arquitectónico.
A nivel cultural la población cuenta con emblemáticos monumentos e interesantes museos como: Los arcos de Medina, museo arqueológico y etnográfica, calzada romana, Iglesia Santa Maria, Plaza Mayor, entre otros.
Y para los amantes de la naturaleza será de gran interés sus playas de ensueño y la posibilidad de hacer senderismo en el Parque Natural de Los Alcornocales
Cabe destacar la gastronomía del lugar con su dulce típico, el alfajor. Es el lugar ideal para los amantes del dulce con confiterías repartidas por toda la localidad. Se ha ganado Denominación de Origen propia: Alfajor de Medina.
>>>Excursión a Vejer y Medina Sidonia<<<
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